Se acabaron las vacaciones y estamos ya comenzando un nuevo año laboral, hemos cambiado las “chanclas” por los zapatos y el bikini por el uniforme laboral,
que aunque no llevemos uniforme ya sabemos que no es lo mismo ir de playa
que ir al trabajo.
Sacaremos de nuevo nuestro despertador y guardaremos la cámara de fotos para esos días de ocio que vendrán con los fines de semana y algún que otro puente.
Lo dicho, que ya estamos de vuelta y hay que ponerse en marcha, retomar viejos proyectos con ilusión y disfrutar con los nuevos. No me voy a extender en las típicas quejas de la vuelta, ni me aferraré al tópico del síndrome post-vacacional que soy muy realista y cuando toca descanso , pues a descansar se ha dicho, pero cuando toca trabajar siempre estoy a la primera, que no se diga..
¿Lo hemos pasado bien? Si, entonces para que quejarse, hay que volver a la rutina diaria del mundo laboral que también tiene su encanto.
Y volvemos con fuerza con ganas e ilusión.
Intentaremos así ser de utilidad y aportar nuestro granito de arena y trabajar para que todos seamos un poquito más eficaces, más eficientes y hasta más felices…¿porque no?
Quiero dar ánimos a todos los que están de vuelta (y a los que este año no se han podido ir) a los que aún están de vacaciones o a los que se van ahora, les deseo que lo disfruten lo más posible y puedan desconectar, que para eso son esos días.
Y para los que ya han comenzado el dia primero y los que hemos comenzado hoy…como una servidora
¡¡ ánimos y adelante!!! Que hay que levantar este país.
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